Aceite de Hachis ¿Que es? ¿Para que sirve? ¿Como se Hace?

Pubicado el : 2023-10-26 19:25:39
Por: Miguel Jose Villar Martínez
Categorias : Noticias Marihuana

Aceite de Hachís

¿Alguna vez te has preguntado cómo se transforma la planta de cannabis en un extracto comestible? ¿O cómo los cultivadores de cannabis aprovechan al máximo sus cosechas? Existen diversas técnicas que permiten convertir los cogollos de cannabis en extractos comestibles. Entre los más conocidos se encuentran las cápsulas de cannabis, la mantequilla de cannabis y las tinturas.

Pero hoy, nos centraremos en el aceite de hachís, también conocido como aceite de extracto de cannabis o RSO. Este es un extracto de cannabis muy popular que muchos cultivadores producen por sí mismos utilizando sus recortes de plantas o cogollos. En esencia, el aceite de hachís es la resina de la planta de cannabis combinada con una pequeña cantidad de una solución. En el mejor de los casos, esta solución se eliminaría por completo del aceite de hachís una vez que esté listo. ¿Quieres saber más? ¿Para que sirve el aceite de hachis?¡Sigue leyendo!

aceite de hachis

¿Por qué el aceite de hachís es tan bueno?

El aceite de hachís es una forma altamente concentrada de cannabis que puede ser tanto consumida como fumada. Su preparación es sencilla y puede realizarse con utensilios de cocina comunes, aunque existen herramientas especializadas que pueden automatizar el proceso. Además, es fácil de almacenar y dosificar. Puedes hacerlo con hachis de CBD para efectos relajantes.

Para preparar el aceite de hachís, se necesita aproximadamente 1/2 oz de cogollo. Aunque pueda parecer mucho, el resultado final vale la pena. A diferencia de otros extractos que utilizan aceite de coco, mantequilla o incluso alcohol isopropílico para unirse al THC, el aceite de hachís se elabora con alcohol de alta graduación apto para uso alimentario. Los productores suelen utilizar etanol o Everclear, pero también pueden usarse otros alcoholes de alta graduación como Spirytus o alcohol de uva.

El proceso de elaboración consiste en mezclar el alcohol y la marihuana, colar la mezcla y evaporar el alcohol, dejando una sustancia espesa y aceitosa que es principalmente resina. Debido a su alta concentración, se necesita muy poco aceite de hachís para obtener los efectos deseados, por lo que una pequeña cantidad puede durar mucho tiempo. El aceite de hachís puede ser consumido de diversas formas: se puede comer, vaporizar, fumar, aplicar con toques o incluso utilizar para aplicaciones tópicas.

El término RSO proviene de Rick Simpson, quien acuñó el término Aceite de Rick Simpson para referirse a su estilo de aceite de hachís. Resulta que RSO es mucho más fácil de decir y escribir que “Aceite de extracto de cannabis”.

¿Qué tipo de alcohol debería utilizar para hacer el aceite de hachis?

El alcohol que se utiliza en la elaboración del aceite de hachís debe ser de alta graduación, es decir, de 190 grados o superior. Este tipo de alcohol es apto para el consumo humano y es el más seguro para utilizar en este proceso. Aunque el alcohol isopropílico puede ser utilizado para aplicaciones tópicas, no es recomendable para la elaboración del aceite de hachís.

Entre las opciones de alcohol de alta graduación que puedes utilizar se encuentran:

  • Etanol: Este es un tipo de alcohol que se utiliza comúnmente en la industria alimentaria y de bebidas. Es seguro para el consumo humano y es fácil de conseguir.
  • Aguardientes rectificados/neutrales: Estos son alcoholes que han sido destilados a 190 grados o más. Entre ellos se encuentran el Everclear y el Spiritus, un vodka polaco de alta graduación.
  • Aguardientes neutros: Estos son alcoholes transparentes que no han sido añejados y que se destilan a 190 grados o más.

Es importante mencionar que no todos los alcoholes de alta graduación son aptos para la elaboración del aceite de hachís. Por ejemplo, el alcohol de uva, aunque es de alta graduación, no es recomendable para este proceso debido a su alto contenido de azúcar.

Además de seleccionar el alcohol adecuado, es importante que sepas cómo descarboxilar la marihuana. Este es un proceso que se realiza antes de la elaboración del aceite de hachís y que consiste en calentar la marihuana para activar el THC, el compuesto psicoactivo del cannabis. Para descarboxilar la marihuana necesitarás un horno, una bandeja para hornear, papel de aluminio o papel pergamino y, por supuesto, marihuana.

Recuerda que la elaboración del aceite de hachís debe realizarse con precaución y responsabilidad. Asegúrate de seguir las instrucciones correctamente y de utilizar los ingredientes adecuados para obtener un producto seguro y de calidad.

¿Es necesario descarboxilar la marihuana antes de hacer aceite de hachís?

Si eres nuevo en el mundo de los extractos de cannabis, es posible que te preguntes qué es la descarboxilación y por qué es importante. En términos sencillos, la descarboxilación es el proceso de calentar la marihuana para activar sus compuestos psicoactivos, transformando el THC-A en THC. Entonces, ¿es necesario descarboxilar la marihuana antes de hacer aceite de hachís? La respuesta puede variar dependiendo de tus objetivos al hacer el aceite, pero en general, la respuesta es un rotundo ¡Sí, siempre debes descarboxilar al hacer aceite de hachís!

aceite de hachis

Aquí te explicamos por qué:

  • Potencia: El proceso de hacer aceite de hachís no genera suficiente calor para convertir todo el THC-A en THC. Si no descarboxilas, terminarás con un aceite que contiene principalmente THC-A, que es menos potente que el THC.
  • Efectos psicoactivos: El THC es el compuesto que produce los efectos psicoactivos asociados con la marihuana. Si no descarboxilas, tu aceite de hachís no te producirá los efectos psicoactivos que esperas.
  • Beneficios medicinales: Algunas personas creen que el THC-A tiene propiedades medicinales y prefieren no descarboxilar para mantener este compuesto en su aceite. Sin embargo, la mayoría de las investigaciones sugieren que el THC también tiene propiedades medicinales, por lo que descarboxilar puede aumentar los beneficios medicinales de tu aceite.
  • Control de la dosis: Descarboxilar te permite controlar mejor la potencia de tu aceite de hachís, lo que puede ser útil si estás usando el aceite con fines medicinales.

En resumen, si quieres un aceite de hachís potente y psicoactivo, debes descarboxilar tu marihuana antes de hacer el aceite. Si prefieres un aceite menos potente y sin efectos psicoactivos, puedes optar por no descarboxilar. Sin embargo, ten en cuenta que esto puede limitar los beneficios medicinales de tu aceite.

Tinturas y lavado rápido

Si eres un entusiasta del cannabis, es posible que ya tengas una tintura de cannabis en tu hogar. ¿No estás seguro de lo que es una tintura? Bueno, es simplemente un extracto de cannabis que se ha infundido en alcohol. Algunos cultivadores de cannabis guardan su tintura en el refrigerador o incluso en el congelador. Si ya tienes una tintura, puedes saltarte algunos pasos y pasar directamente a la evaporación del alcohol.

Si no tienes una tintura a mano, no te preocupes. Puedes hacer un ""lavado rápido"" para crear tu propia tintura. Este es un proceso increíblemente sencillo, pero también muy efectivo. Aunque puedes hacer un lavado rápido en tan solo 20 minutos, te recomendamos que congeles el alcohol y la marihuana durante la noche para obtener mejores resultados.

El color, sabor y potencia de tu aceite de hachís dependerán de la mezcla inicial que utilices. Las tinturas oscuras, como las que se describen en este tutorial, producirán un aceite de hachís casi negro, que es el aspecto ""tradicional"" del RSO. Por otro lado, un lavado rápido bien hecho producirá una tintura dorada que resultará en un aceite de hachís dorado. Ambos métodos tienen sus ventajas, así que te animamos a experimentar con ambos.

Para hacer tu propia tintura necesitarás

  • 2 frascos de vidrio
  • Hierba descarboxilada (consulta la receta anterior)
  • Alcohol de alta graduación (190 grados o más)
  • Filtros de café de papel

Una tintura de etanol de lavado rápido bien hecha será de color dorado. A pesar de lo que pueda parecer, este es el color que estás buscando. ¡Buena suerte en tu aventura de extracción de cannabis!

Cómo realizar un “lavado rápido”

El ""lavado rápido"" es un método eficiente y sencillo para extraer los compuestos activos del cannabis y convertirlos en una tintura. Este proceso, aunque simple, requiere de precisión y cuidado para obtener los mejores resultados. Aquí te presentamos una guía paso a paso para realizar un ""lavado rápido"" de manera efectiva:

  • Preparación previa: Para obtener los mejores resultados, es recomendable colocar tanto el alcohol como la marihuana en el congelador durante la noche. Este paso ayuda a que el alcohol absorba menos material no deseado, como la clorofila, durante el proceso de extracción.
  • Uso de hierba descarboxilada: Es importante utilizar hierba que haya sido previamente descarboxilada. Este proceso activa los compuestos psicoactivos del cannabis, lo que resulta en una tintura más potente.
  • Medición correcta: Coloca la hierba fría y descarboxilada en un tarro de cristal y vierte suficiente alcohol helado para cubrir completamente la hierba, añadiendo aproximadamente 1/2 cm adicional. Este paso asegura que todos los compuestos activos del cannabis sean extraídos de manera efectiva.
  • Tiempo de reposo: Deja reposar la mezcla durante 20 minutos. Este tiempo es suficiente para que el alcohol extraiga los compuestos activos del cannabis. Sin embargo, es recomendable agitar la mezcla durante unos 30 segundos después de que hayan pasado los 20 minutos para asegurar una extracción completa.
  • Filtrado: Coloca un filtro de café sobre un segundo frasco de vidrio y vierte la mezcla a través del filtro. Este paso separa la tintura del material vegetal, dejando un líquido dorado que es tu tintura de lavado rápido.

Recuerda que la seguridad es primordial al realizar este proceso. Asegúrate de trabajar en un área bien ventilada y lejos de cualquier fuente de calor o chispas, ya que el alcohol es altamente inflamable. Además, es importante almacenar la tintura de manera segura, fuera del alcance de niños y mascotas.

Cómo hacer aceite de Hachís: Método Artesanal

¿Sabías que ya has completado la mitad del camino para obtener tu propio aceite de hachís? Sí, has leído bien. Al tener en tus manos una tintura de cannabis, estás a un paso de convertirla en un potente aceite de hachís. Ahora bien, ¿cómo se logra esto? Podrías pensar en dejar la tintura en reposo hasta que el alcohol se evapore por completo, pero eso podría tomar bastante tiempo.

Por ello, te proponemos un método más eficiente: la cocción a baño maría. Este proceso permite evaporar el alcohol de la tintura de manera segura y controlada. Aunque puede parecer complicado, es bastante sencillo si sigues las instrucciones al pie de la letra. Eso sí, es importante que utilices una estufa eléctrica y la mantengas a fuego lento para evitar accidentes. Recuerda, estamos trabajando con alcohol de alta graduación, por lo que combinarlo con una llama abierta podría ser peligroso.

aceite de hachis

Ahora bien, ¿cómo se realiza la cocción a baño maría? Aquí te lo explicamos:

  • Vierte la tintura en un recipiente resistente al calor. Este será tu recipiente interno.
  • Llena otro recipiente más grande con agua. Este será tu recipiente externo. Asegúrate de que el recipiente interno pueda flotar en el agua sin volcarse.
  • Coloca el recipiente interno dentro del recipiente externo. El agua debe llegar hasta la mitad del recipiente interno.
  • Enciende la estufa a fuego lento y coloca el recipiente externo sobre ella. El calor del agua evaporará el alcohol de la tintura de manera gradual y segura.
  • Revuelve la tintura de vez en cuando para asegurarte de que el calor se distribuya de manera uniforme.
  • Una vez que el alcohol se haya evaporado por completo, lo que quedará en el recipiente interno será una sustancia espesa y pegajosa. ¡Felicidades, has obtenido tu propio aceite de hachís!

Recuerda, la seguridad es primordial en este proceso. Asegúrate de trabajar en un área bien ventilada y lejos de cualquier fuente de calor o chispas. Además, es importante almacenar el aceite de hachís de manera segura, fuera del alcance de niños y mascotas.

Precauciones de seguridad: Un paso esencial

Antes de embarcarte en la aventura de elaborar tu propio aceite de hachís, es crucial tener en cuenta algunas medidas de seguridad. Aquí te dejamos una lista de verificación para garantizar un proceso seguro:

  • Ventilación adecuada: Asegúrate de que el espacio de trabajo esté bien ventilado. Esto puede lograrse simplemente abriendo una ventana o utilizando un ventilador.
  • Evita las llamas abiertas: Dado que trabajarás con alcohol de alta graduación, es importante evitar cualquier fuente de ignición. Esto incluye encendedores, velas y estufas de gas.
  • Extintor de incendios: Siempre es mejor prevenir que lamentar. Tener un extintor de incendios a mano puede ser la diferencia entre un pequeño contratiempo y un desastre.
  • Supervisión constante: No dejes el proceso sin supervisión. Asegúrate de estar presente durante todo el proceso hasta que el aceite de hachís esté listo y todo esté apagado.

Materiales necesarios

Para la elaboración del aceite de hachís necesitarás los siguientes suministros:

  • Tintura de cannabis: Puedes prepararla siguiendo las recetas de Quick Wash que hemos mencionado anteriormente.
  • Baño María: Puedes crear un baño María utilizando una olla y una sartén. Recuerda que deben tener un espacio para que el vapor escape.

aceite de hachis

Proceso de elaboración

Sigue estos pasos para elaborar tu propio aceite de hachís:

  1. Llena la olla de tu baño María con aproximadamente 3 pulgadas de agua y caliéntala hasta que hierva. Luego, reduce el fuego a medio-bajo.
  2. Coloca la sartén en la parte superior del baño María, asegurándote de que el vapor pueda escapar.
  3. Vierte la tintura en la sartén. Debería comenzar a calentarse y eventualmente a burbujear un poco.
  4. Continúa supervisando la tintura mientras se evapora lentamente, transformándose en una sustancia aceitosa similar a un lodo.
  5. Una vez que la tintura se haya evaporado por completo, apaga el fuego y recoge el aceite de hachís. Es más fácil hacerlo mientras aún está caliente, ¡así que no pierdas tiempo!

Recuerda, la seguridad es primordial en este proceso. Asegúrate de seguir estas instrucciones al pie de la letra para obtener un producto seguro y de alta calidad.

Cómo hacer aceite de Hachís – Método automatizado

Elaborar aceite de hachís puede ser un proceso sencillo si se cuenta con los utensilios adecuados. Aunque es posible hacerlo con una estufa y un poco de paciencia, existen dispositivos que pueden facilitar enormemente esta tarea. Uno de ellos es el extractor Source Turbo.

Este dispositivo, diseñado específicamente para la extracción de aceites de cannabis, ofrece varias ventajas sobre los métodos tradicionales:

  • Recuperación de alcohol: El extractor Source Turbo es capaz de recuperar hasta el 95% del alcohol utilizado en el proceso de extracción. Esto significa que puedes reutilizar el alcohol varias veces, lo que a largo plazo puede representar un ahorro considerable, dado el costo del alcohol de alta graduación.
  • Seguridad: Este dispositivo ha sido diseñado con la seguridad en mente. Crea un vacío que evita la liberación de vapores inflamables, y su temperatura de funcionamiento es lo suficientemente baja como para evitar la ignición de los vapores de alcohol.
  • Facilidad de uso: Con el extractor Source Turbo, la elaboración de aceite de hachís es prácticamente un juego de niños. Solo tienes que configurarlo y esperar a que termine. Eso sí, aunque el dispositivo es seguro, siempre es recomendable permanecer en la misma habitación mientras está en funcionamiento.

A pesar de sus ventajas, el extractor Source Turbo tiene un inconveniente importante: su precio. Con un costo de alrededor de $600, puede ser una inversión considerable. Sin embargo, si planeas hacer aceite de hachís de manera regular, puede que valga la pena la inversión.

Si estás buscando una forma segura, eficiente y fácil de hacer aceite de hachís, el extractor Source Turbo puede ser una excelente opción. Solo asegúrate de tener en cuenta el costo inicial y de considerar si el ahorro a largo plazo justifica la inversión.

Suministros necesarios: Más allá de lo básico

Para la elaboración del aceite de hachís, es esencial contar con los suministros adecuados. Aunque la tintura de cannabis es un ingrediente fundamental, existen otros elementos que pueden optimizar el proceso y mejorar la calidad del producto final. Uno de ellos es el extractor Source Turbo.

Este dispositivo, aunque representa una inversión considerable, ofrece ventajas significativas para aquellos que producen grandes cantidades de aceite de hachís. No solo facilita el proceso de extracción, sino que también permite la recuperación y reutilización del alcohol, lo que puede resultar en un ahorro a largo plazo.

Guía rápida para utilizar el extractor Source Turbo de manera efectiva

  • Preparación: Coloca el extractor sobre una superficie plana y asegúrate de que todas las piezas estén correctamente alineadas.
  • Carga de la tintura: Vierte la tintura de cannabis en la taza del depósito y enrosca la taza en el extractor.
  • Inicio del proceso: Coloca la tapa en el extractor, conéctalo y sella el vacío utilizando la válvula frontal. Inicia el dispositivo y espera a que alcance el vacío total, lo que debería tomar menos de 5 minutos.
  • Supervisión: Asegúrate de estar presente durante todo el proceso de extracción. Aunque el extractor es seguro, siempre es recomendable supervisar el proceso para evitar cualquier problema.
  • Finalización: Una vez finalizada la extracción, apaga el dispositivo, libera el vacío y deja que la cámara se enfríe durante unos minutos.
  • Recolección del aceite: Recoge el aceite de hachís del extractor. La textura del aceite cambiará a medida que se cocina, pasando de una tintura a un aceite, a algo parecido a una savia y a una cera. Detén el proceso cuando la textura y consistencia sean de tu agrado.
  • Recuperación del alcohol: Recoge el alcohol del extractor y guárdalo para reutilizarlo en futuras extracciones.

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Recuerda, la seguridad es primordial en este proceso. Asegúrate de trabajar en un área bien ventilada y lejos de cualquier fuente de calor o chispas. Además, es importante almacenar el aceite de hachís de manera segura, fuera del alcance de niños y mascotas.

¿Cómo aprovechar al máximo el aceite de hachís?

El aceite de hachís es un producto versátil que puede ser incorporado en una variedad de métodos de consumo, dependiendo de la consistencia del aceite que hayas elaborado.

  • Consumo oral: Si has reducido tu aceite a una tintura potente, puedes ingerirla directamente o mezclarla con un líquido de sabor fuerte para enmascarar su sabor. También puedes incorporarlo en tus recetas favoritas, añadiéndolo a salsas, aderezos o incluso postres.
  • Fumar o vaporizar: El aceite de hachís puede ser aplicado a flores secas de cannabis y luego fumado o vaporizado. Este método permite una rápida absorción de los compuestos activos del cannabis, proporcionando efectos casi inmediatos.
  • Aplicación con toques: Si has elaborado una cera de hachís, puedes utilizarla para hacer ""toques"", un método de consumo que implica calentar la cera y luego inhalar el vapor producido. Este método es conocido por su potencia y rapidez de efectos.
  • Cápsulas de gelatina: Si prefieres un método de consumo discreto y sin sabor, puedes colocar tu aceite de hachís en cápsulas de gelatina vacías. Este método permite una dosificación precisa y es fácil de llevar contigo a donde quiera que vayas.
  • Almacenamiento: El aceite de hachís puede ser almacenado en el refrigerador para mantener su frescura y potencia. Sin embargo, ten en cuenta que el aceite de hachís frío puede solidificarse, por lo que necesitarás calentarlo antes de usarlo.

Recuerda, la forma en que elijas consumir tu aceite de hachís dependerá de tus preferencias personales y necesidades. Siempre asegúrate de comenzar con una dosis baja y aumentar gradualmente hasta encontrar la dosis que funcione mejor para ti.

¡Buenos humos!

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